Lamentablemente el Sr. Carlos Caso-Rosendi
persevera en sus acusaciones hacia mi persona en cuanto lugar parece tener
disponible. A estas alturas no quedan dudas acerca de la triste obsesión
que sufre este señor. Anhelo que el Espíritu Santo le libere de esa carga.
Tal como menciono, el tema de las
acusaciones de Caso-Rosendi no es nuevo. En este sentido recomiendo
la lectura del
artículo
que escribí oportunamente para inicializar la cuestión general sobre
ciertas
actitudes públicas de esta persona.
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Caso-Rosendi |
Nuevamente me acusa de mentiroso.
Nuevamente demostraré que su acusación es falsa.
"20 mitos católicos..."
El 23/10/2004 publiqué en este sitio el
artículo "20 mitos
católicos referentes al Cristianismo Evangélico". A los 32 días recibí
en la casilla de correo oficial de "Conoceréis la Verdad" un email de
Ricardo Vecco (católico romano de Lima-Perú), conteniendo un escrito
anónimo titulado "Daniel Sapia no conoce
la Iglesia que tanto critica". Como se refería a mi
mencionado articulo ("20 mitos.."), a los 2 días decidí colocar una nota
al pie del mismo, mencionando lo sucedido. Allí se puede leer (hasta el
día de hoy) lo siguiente:
ACTUALIZADO AL 25/11/2004
Me ha llegado por correo un artículo
titulado "Daniel Sapia no conoce a la
Iglesia que tanto critica", en donde el autor ensaya
(infructuosamente) refutar lo expuesto en este artículo.
Lamentablemente dicho autor no da a conocer su nombre, con lo
cual el escrito termina resultando ANÓNIMO. Curiosa actitud,
para alguien que no sólo allí me nombra 50 (cincuenta) veces, sino que
además se ha tomado el trabajo hasta de acompañar al escrito con
una foto mía. Para pensar: peculiar "verdad" aquella que se
defiende detrás del anonimato... Otra actitud que habla del perfil de este autor es
el no haber colocado el enlace web del artículo criticado, cosa que
no sólo es de SENTIDO ÉTICO, sino que además así expresamente se
solicita en la página principal de este sitio web. Por último, y de
forma desagradablemente peyorativa, me trata de
"apóstol de un triste evangelio de
resentimiento e ignorancia" con un
"público propio
que está listo a creer en un periquete lo
que sea que se diga contra la Iglesia Católica.." a
quienes no duda en calificar como "pobres
gentes que se guían por sus sentimientos de rechazo a la Iglesia
[Católica Romana]..". Como si todo esto fuera poco, la
calidad y veracidad de exposición de este anónimo autor es tan pobre
que ni siquiera merece ser comentada, pues pone en mi boca cosas que
NUNCA DIJE, otras las tergiversa y muchas simplemente las ignora.
Nada nuevo bajo el sol. |
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En la primera semana de Diciembre 2004 otro
católico me escribe para "avisarme" que el artículo en realidad no era
anónimo, sino que tenía autor = Carlos Caso-Rosendi. Entonces
incluí dicha novedad a continuación de la anterior nota...
[1] Con posterioridad me he
enterado que el autor del escrito (aunque con otro título), es
Carlos Caso-Rosendi, un católico romano residente en EUA. Hace pocos
días tuve oportunidad de conocer sus expresiones "en vivo", en un
foro de debate. Habiendo experimentado su lamentable estilo
provocador y peyorativo, pude comprender las raíces de donde pueden
llegar a nacer comentarios como los precedentes. |
|
Hasta aquí, la historia.
Falsa acusación
El 14/05/2005 Carlos Caso-Rosendi,
comenta en su sitio web mi nota del pie de página (citada antes), y la
menciona como "MENTIRA"
(los resaltados amarillos son agregados. Los números de referencia en azul
orientan mi aclaración)
Así se lee en la página de
Caso-Rosendi
Publicado: 14 Mayo 2005 10:54 am |
MENTIRA NUMERO 1
ACTUALIZADO AL 25/11/2004 Por Daniel Sapia:
Me ha llegado por correo un artículo titulado "Daniel Sapia no
conoce a la Iglesia que tanto critica", en donde el autor ensaya
(infructuosamente) refutar lo expuesto en este artículo.
Lamentablemente dicho autor no da a conocer su nombre, con lo cual
el escrito termina resultando ANÓNIMO [1]. Curiosa actitud, para
alguien que no sólo allí me nombra 50 (cincuenta) veces, sino que
además se ha tomado el trabajo hasta de acompañar al escrito con una
foto mía. Para pensar: peculiar "verdad" aquella que se defiende
detrás del anonimato...
RESPUESTA NUMERO 1
No sé quién le habrá enviado
el artículo anónimamente.[1]
El tal artículo ha estado en esta página desde hace meses (salió en
la segunda edición de Primera Luz en Noviembre de 2004 firmado con
nombre y apellido) Lo de infructuosamente seria interesante
demostrarlo en vez de descalificar y callar, como normalmente hacen
los mentirosos. De anonimato
no hay nada
[2],
es mi página mi nombre y apellido. El mismo que viste y calza y
Daniel Sapia no se
hubiera enterado si la nota no hubiera sido publicada con firma y
todo
[3].
Aqui hay gato
encerrado ¿recibes anónimos que están publicados en el internet?
¡Que extraña clase de anónimo!
[4]
En Primera Luz estan los artículos publicados con firma y todo ya
hace varios meses como bien
lo sabe Daniel, pues él mismo ha objetado personalmente a
estos escritos en el foro Catholic.net donde cualquiera los
puede leer con fecha
[5],
hora y todo. De lo
que se deduce que el sr. Sapia miente
(como es su costumbre) o tiene muy mala memoria
[6]. 1 Juan 2:4 |
www.voxfidei.com
Comentarios
[1] El
artículo, con el título cambiado y anónimo, me fue enviado por
Ricardo Vecco, de Lima-Perú, el Martes 23 de Noviembre de 2004 a las
22:13. Vecco es colaborador en la página del católico Jesús Hernández
(México). Una COPIA del email recibido puede ser descargada
aquí. Si el Sr. Caso-Rosendi
lo desea, puede verificar lo expuesto escribiéndole al Sr. Vecco a la
dirección remitente del escrito anónimo:
[email protected] o a
[email protected]
copia del email de R.Vecco
(23/11/2004, 22:13)
[2] De
"anonimato" hubo mucho, pues así recibí el escrito en la fecha
mencionada.
[3] Me
enteré originalmente del escrito (pero no de su autor) conforme al envío
de Ricardo Vecco, como he mencionado en el punto [1].
[4]
Ningún gato encerrado. Nunca supuse la obligación de tener que "rastrear"
en Internet todo anónimo recibido. La crítica carece de fundamento serio.
[5]
Participé en el Foro aludido (si no recuerdo mal) entre el 10 y el
22/12/2004. A esa altura yo ya conocía quien era el responsable del
escrito. No obstante, haberlo objetado en dicho Foro no desacredita la
realidad de que el escrito ciertamente lo recibí ANÓNIMO y en esa condición
se mantuvo durante los posteriores 13 días. Por más que se esfuerce y
me trate de "mentiroso",
Caso-Rosendi no podrá cambiar esa realidad.
[6]
Caso-Rosendi deduce mal: ni miento
, ni "es mi costumbre" (según afirma) ni tampoco tengo "muy
mala memoria". Mi memoria es muy buena (gracias a Dios) y mis archivos
documentales también, de los que surgen a) el
escrito anónimo recibido
oportunamente y b) la dirección de email del remitente, para que el Sr.
Caso-Rosendi o quien desee, verifique la veracidad de lo expuesto.
Los insultos de Caso-Rosendi
son moneda corriente en sus respuestas. No obstante en sus artículos
podemos encontrar bonitos párrafos como el siguiente, que lamentablemente
sólo quedan en la teoría:
"Ya
pasó el tiempo en que vivíamos siguiendo nuestras fobias y nuestras
pasiones, odiando sin motivo, siendo injustos en nuestros juicios"...
El tiempo no ha pasado...
Caso-Rosendi es ejemplo claro y demostrable de ello.
Conclusión
Las acusaciones del Sr. Carlos Caso-Rosendi
resultaron falsas e injustificadas, una vez más.
Mateo 7:1-5
Bendiciones en Cristo
Daniel
Sapia
Junio 2005

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